Grupo armado ataca una estancia en Concepción

Un grupo de entre cuatro hombres y una mujer armados y vestidos con vestimenta camufladas atacaron ayer una estancia denominada Oro Verde, situada en la ciudad de Horqueta, Departamento de Concepción.

Anoche, las autoridades de la Fuerza de Tarea Conjunta no dieron a conocer si hubo o no heridos en el atentado. Tampoco atribuyeron el hecho al grupo armado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).

En ese sentido, mencionaron que el ataque es similar a los hechos de agresión que los miembros del EPP suelen cometer en la zona Norte del país. Alegaron que debido a la incipiente investigación del caso, aún no cuentan con mayores reportes de este hecho y que el personal interviniente aún no dio reporte de lo ocurrido.

Fuentes de la investigación detallaron que el ataque se cometió contra el casco central de la mencionada estancia y que los datos preliminares hablan de la quema de dos camionetas, dos tractores y un cachapé.

Luego, los autores dieron una advertencia a los funcionarios del establecimiento y se dieron a la fuga, internándose nuevamente en una zona boscosa.

El personal de la estancia logró comunicar el hecho a los agentes de la Policía Nacional y posteriormente se trasladaron hasta el lugar equipos tácticos de fuerzas especiales de la FTC, además de agentes de la Fiscalía, de la Sección Criminalística y del Departamento de Antisecuestro.

La comunicación en la zona es bastante complicada, indicaron desde la Jefatura de Policía de Concepción.

La estancia Oro Verde ya había sido atacada por miembros del EPP, el 7 de marzo del 2014. En la ocasión, los soldados del grupo armado tomaron de rehenes a 12 peones y sus respectivas familias, también quemaron la casa patronal al igual que 4 tractores, un camión y un depósito.

En su denuncia, las víctimas relataron a los agentes de la FTC y de la Fiscalía que los autores fueron 8 hombres armados y vestidos con ropas camufladas con siglas bordadas del EPP. Sin embargo, ninguno de los agresores pudieron ser reconocidos por los funcionarios de la estancia.

Esa vez, los agresores no dejaron ninguna nota ni comunicado alguno, solamente amenazas verbales, en el que amenazaban de muerte a quienes incumplían “sus leyes revolucionarias”.

Fonte – Amambay570